“Inútil invitar al diálogo” responde Uribe a Santos sobre invitación a “trabajar por la paz”
El expresidente colgó la carta de respuesta en su cuenta de Twitter.
“Inútil invitar a un diálogo para notificar lo resuelto” respondió este miércoles el expresidente Álvaro Uribe Vélez al Presidente Juan Manuel Santos quien lo invitó en la víspera a “trabajar por la paz”.
Esta carta que fue colgada por Uribe Vélez en su cuenta de Twitter es una clara negativa a la iniciativa presidencial que por segunda ocasión se dirige en estos términos a su antecesor y de quien fue Ministro de defensa.
Ese “diálogo constructivo” como lo plantea Santos es rechazado por Uribe al expresar que “ha sido dañino para la democracia que personas con responsabilidades públicas creen confusión entre la indulgencia al narco terrorismo en nombre de la paz y la represión al reclamo justo en nombre de la autoridad”.
Uribe cuestiona a Santos al señalar que “ha sido dañino para la democracia que personas con notoriedad pública distraigan a los ciudadanos en el juego entre el insulto y el elogio, entre la acusación temeraria y la declaración magnánima”.
El texto completo de l carta es el siguiente:
“Sobre carta del Presidente de la República publicada en diferentes medios.
Ha sido dañino para la democracia que personas con notoriedad pública distraigan a los ciudadanos en el juego entre el insulto y el elogio, entre la acusación temeraria y la declaración magnánima.
Ha sido dañino para la democracia que personas con responsabilidades públicas creen confusión entre la indulgencia al narco terrorismo en nombre de la paz y la represión al reclamo justo en nombre de la autoridad.
Ha sido dañino para la democracia que personas con responsabilidades públicas aparenten diálogo para claudicar ante el terrorismo e imponer a sectores ciudadanos, que expresan argumentos críticos, la adhesión a lo claudicado y ya consumado; sectores ciudadanos que añoran paz estable y sin riesgos para la democracia.
Parecería inútil invitar a un diálogo para notificar lo resuelto. Cuando el crimen es campeón, el perdón y la reconciliación corren el riesgo de no ser sinceros y la paz sin justicia corre el riesgo de no ser paz”.